Se ha dicho hartas veces que el problema de España es un un problema de cultura. Urge, en efecto, si queremos incorporarnos a los pueblos civilizados, cultivar intensamente los yermos de nuestra tierra y de nuestro cerebro, salvando para la prosperidad y enaltecimiento patrios todos los ríos que se pierden en el mar y todos los talentos que se pierden en la ignorancia.
Santiago Ramón y Cajal
En el día de apertura de mi blog, quiero homenajear al caballero de las rosas. Julio Palazón falleció hace unos días, cuando todavía no había aparecido el ruiseñor de abril.
La razón de su vida fue volar alto, tan alto como alcanzaban los versos pintados en las tapias que protegían su jardín. Cada rosa, cada sorbo de bon vino, cada poema nos hicieron compartir ese vuelo a los amigos verdaderos, los que reconocimos a un ser único que fascinaba en su singularidad. Rosas inglesas, provenzales, holandesas o andaluzas, traídas con tanta ilusión para adornar un rincón áspero y seco de Aragón. Rosas literarias, lorquianas o viscontinianas, cada una con su historia, su más o menos rápida decadencia y desaparición. Todas las rosas, y mimándolas, un jardinero poeta. Yo guardo algún pétalo desmayado entre las hojas de "Il Gattopardo", tal vez de la mutabilis, aquella que se asemejaba a doña Rosita la soltera, que roja brillante en las mañanas agonizaba en soledad al atardecer en la más absoluta nada... Doña Rosario, como tú me llamabas quizá rememorando a la rosa que no podía vivir sin poesía, espera que te encuentres definitivamente en el eterno jardín de tu huerto de la "Media Legua".
El mejor poeta del Generalife Ibn Zamrak cantó:
"En el jardín nos hiciste ver
todo género de maravillas que
no existen, ni aun se sospecha
en el paraíso eterno"
Y el "Cantar de los Cantares" recita:
"La amada llama al viento Sur
para que sople por su huerto,
y el amado pueda alimentarse
entre sus flores".
Hasta pronto, jardinero.
"Mira el mar,qué hermoso es, inspira tanto sentimiento, como tú, que a quien
miras, despierto le haces soñar.
Mira, fíjate en estos jardines, huele, huele estas flores de naranjo, un perfume
tan suave va derecho al corazón...."
No hay comentarios:
Publicar un comentario